La teoría de la X-barra propone una respuesta a cómo se forman las estructuras de frase o sintagmas de las lenguas naturales. Su capacidad explicativa nos permite ofrecer a los alumnos una herramienta para introducirles en el análisis sintáctico y que aprecien las regularidades en la estructuración interna de los sintagmas.
Este curso he presentado la teoría de la X-barra a mis alumnos de 3.º de ESO. El resultado ha sido muy satisfactorio.
La teoría me ha servido para introducir el concepto de sintagma y los tipos de sintagmas de las categorías léxicas. Por supuesto, he propuesto sencillos ejercicios de representación de la estructura de frases nominales, adjetivales, adverbiales, preposicionales y verbales. La ventaja de la representación arbórea es que permite mostrar más adecuadamente las relaciones jerárquicas entre los constituyentes de una frase, que en el análisis en cajas o en líneas quedan difusas y no ayudan a entender las relaciones de dependencia.
¿Cómo se puede aplicar la teoría de la X-barra?
Se presenta la teoría de la X-barra y se aplica a cada sintagma de núcleo léxico (N, A, Adv, V, P) con ejemplos sencillos en los que solo haya como máximo un complemento hermano del núcleo y un especificador. Más adelante se pueden añadir adjuntos y ver en qué nodo se incorporan y a qué elementos del árbol afectan.
Se pueden representar en cajas y diagrama arbóreo sintagmas con distintas estructuras, comparar los diagramas y reflexionar cuál representa más fielmente las relaciones de dependencia en un sintagma.
El fin no es otro que ofrecer a los alumnos una herramienta teórica que les permita captar mejor la formación de los sintagmas y las relaciones de dependencia que se establecen en ellos.
La teoría de la X-barra nos sirve, pues, como un fin en sí misma (un objeto de estudio más que incorporar a su conocimiento de la lengua), pero sobre todo como un medio para explicar y comprender la sintaxis.
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